Es por ello que si tu sueño es emprender y lo has intentado, pero no obtuviste los resultados que buscabas, te dejo cinco consejos que te serán útiles para despertar y empezar de nuevo.
1. Si estás convencido del éxito de tu idea de negocio, pero lo quebraste antes de obtener ganancias, tienes dos opciones. La primera, enfócate mejor en el plan financiero, centrándote en lo que hiciste mal y, por favor, ¡no lo repitas! La segunda, puede ser que la idea no sea tan atractiva, entonces mejor pide consejo de otros emprendedores o de mentores expertos.
2. Si tu error fue sentir sin pensar, ¡no te preocupes! También es válido seguir instintos, pero hay que sustentarlo con un plan de negocios, una estrategia comercial y una buena cadena de distribución. Todo tiene solución, siempre y cuando sea modificado el plan y la visión general del negocio.
3. En caso de que hayas intentado en algún campo tecnológico en que el mercado aún no estaba listo, podrías hacer un nuevo intento, esta vez apoyándote en las plataformas especializadas en desarrollar profesionalmente el modelo.
4. Por el contrario, si tu modelo de negocio “estaba muy visto” tienes que probar un valor agregado. Quizás abriste una cafetería sin un diferenciador, algo básico para una marca.
5. Tu idea fue tan buena, pero no te alcanzó el tiempo o el dinero para consolidarla… Deberías de acercarte al inversionista adecuado, ya sea por medio del crowfunding o con una red de networking eficaz, que pueda negociar el tipo de participación que tu empresa necesita.
Recuerda que cualquier error puede ser reparado si tienes la determinación y la suficiente resi- liencia para levantarte después de caer. Equivocarse es válido; el secreto está en ver ese fracaso como una experiencia y sacar una inflexión para ser parte del cambio que queremos ver en el mundo.